El ex alcalde defiende su inocencia ante la
jueza en un interrogatorio como investigado que se prolongó dos horas.
Se confiesa "sorprendido y tranquilo", pero "dolido".
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Con un paraguas en una mano y un chaquetón en la otra,
accedió ayer el exalcalde José Torres Hurtado a la sala de vistas que
han pisado antes que él catorce de los investigados en el denominado
caso Nazarí, en el que la jueza de Instrucción 2, María Ángeles Jiménez,
investiga una supuesta trama corrupta en el área de Urbanismo del
Ayuntamiento de Granada. Mientras el agua amenazaba con caer fuera del
edificio judicial de la Caleta, el regidor aguantaba otra lluvia, de
preguntas, dentro. Su interrogatorio se inició a las 10:17 horas y duró
algo menos de dos horas. Salió de los juzgados a las 12:10 horas. Solo
le acompañaba su abogado, Pablo Luna.
El exalcalde
popular acudió trajeado a su cita con la Justicia. Atendió a la prensa
frente a la puerta de entrada cuando concluyó su declaración. Decenas de
informadores, entre cámaras, redactores, reporteros y fotógrafos, lo
rodearon completamente. Encabezó sus palabras expresando su sorpresa
ante una imputación ligada a asuntos relacionados precisamente con un
sector en crisis, el urbanístico. "Quiero empezar diciendo que estoy
durante este tiempo, desde que apareció esta imputación, un poco
sorprendido por no decir muy sorprendido", pues el de la construcción,
como recordó, es "un sector económico que está absolutamente arruinado y
que no ha generado ni una sola economía positiva, y no solamente en
Granada, sino en España".
Así, tras insistir en su
asombro ante el hecho de que se investigue "una supuesta trama de
corrupción económica de un tema urbanístico, cuando no existe nada
económicamente positivo en el urbanismo, sino todo lo contrario" y se
trata de un ámbito que "está absolutamente parado", proclamó una vez más
su inocencia.
La sala donde se desarrolló su
interrogatorio, que como los de los demás implicados fue grabado en
soporte audiovisual, se halla en la quinta planta de los juzgados, en
cuyos pasillos permanecieron los periodistas armados de paciencia,
libretas y grabadoras durante todo el tiempo que duró la comparecencia.
El grupo de informadores era tan numeroso que fue advertido por una
funcionaria del juzgado para que sus conversaciones fuesen más
silenciosas.
Durante las dos horas frente al estrado, la
magistrada y la fiscal del caso, Sara Muñoz-Cobo, formularon al ex
primer edil "una serie de preguntas" sobre los asuntos urbanísticos de
la ciudad. "Yo he puesto de manifiesto que soy absolutamente inocente
sobre este tema, porque yo en Urbanismo tengo muy poco que hacer, o he
hecho muy poco, porque está todo delegado, igual que en el resto de las
áreas", advirtió Torres Hurtado. "Siempre ha estado delegado y jamás he
retirado la delegación, ni siquiera una vez, por lo que es un tema que
está en manos de los funcionarios y el concejal o concejala
correspondiente, y el alcalde ha tenido nada que hacer en este tema",
añadió.
En cuanto a su estado de ánimo ante el proceso,
el exalcalde afirmó sentirse "tranquilo, muy tranquilo", aunque confesó
estar "dolido por las circunstancias que se han producido", sobre todo
"porque tiene poca lógica el tema".
"Alcalde, ¿se le ha
preguntado por alguna relación con alguna empresa?", fue el primer
interrogante que le lanzó la prensa. "Mire, se me han hecho tantas
preguntas que no voy a relatar todas, de todo tipo, y como está bajo
secreto no voy a ser yo el que las desvele", contestó el exregidor. Y es
que el secreto de sumario que existe en la causa, acordado el pasado 15
de enero, sigue vigente tras haber sido prorrogado ya tres veces. Se
trata de una medida que tiene una duración máxima de un mes y el próximo
domingo cumplirá el plazo de la tercera prórroga, por lo que en breve
se sabrá si la jueza decide levantarlo o no. Aunque estaba en un
principio previsto que el interrogatorio del exalcalde fuese el último,
aún faltan por declarar dos investigados, cuyas comparecencias tuvieron
que ser aplazadas. Estos dos investigados están citados para el día 17.
"Si
yo tengo delegados todos los temas de Urbanismo; si yo no he quitado la
delegación nunca; si yo no he firmado ningún decreto ni ninguna
cuestión ni ninguna licencia, entre otras cosas porque son regladas; si
no he participado en ninguna mesa de contratación; si yo no he tenido
nada que ver en este tema, pues por eso he dicho que estoy sorprendido,
bastante sorprendido", insistió el exalcalde ante los micrófonos.
Momentos
antes de despedirse de los periodistas, aclaró que al haberse
presentado unas denuncias, "lógicamente" el Ministerio Fiscal y la jueza
tienen que investigar, "y ahora mismo -agregó- lo que estamos es en esa
investigación, que estoy seguro que por lo menos en mi caso quedará en
nada porque no hay nada".
Mientras se alejaba de los
juzgados y los objetivos captaban sus últimas imágenes abandonando la
Caleta junto al letrado que ejercerá su defensa en el caso, Torres
Hurtado recibió una última pregunta: "¿Cree que los denunciantes
tendrían que ser investigados?". Su respuesta fue: "Yo creo que sí,
sería bueno".
Desde el pasado 26 de abril hasta ahora han
declarado 15 de los 17 implicados en la supuesta trama. Solo 16 de
ellos fueron detenidos en la macrooperación policial llevada a cabo el
pasado día 13 por la UDEF y el Grupo de Delitos Económicos de la Brigada
Provincial de Policía Judicial.
Hasta la fecha todos han negado ante la jueza que haya
existido un contubernio. La causa, que ha costado la Alcaldía a Torres
Hurtado, se originó con dos querellas de la Fiscalía por dos operaciones
urbanísticas concretas: las relacionadas con el pabellón Mulhacén del
Zaidín, cuyo promotor fue Roberto García Arrabal, y el Residencial
Ciudad de la Luz, levantado por José Julián Romero. Ambos empresarios
figuran también en el listado de investigados, así como la exconcejala
de Urbanismo, Isabel Nieto, o el actual director de Obras del
Consistorio, Manuel Lorente.
En el Caso Nazarí se
investigan entre cinco y diez operaciones urbanística de los últimos
diez años en la capital. En cuanto a los delitos apreciados de momento
de forma indiciaria, ascienden a una decena: cohecho, fraude en la
contratación, asociación ilícita, prevaricación, tráfico de influencias,
malversación de caudales públicos, estafa, falsedad en documento
mercantil, administración desleal y contra la ordenación del territorio.
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