Leo Messi no es el único crack que acaba contrato en 2018 y
que aún no ha encarrilado su renovación con su actual club. Eso mismo
sucede con Isco Alarcón, centrocampista del Real Madrid, cuya
relación con el club blanco concluye también el 30 de junio de 2018. Son
numerosos los clubs que están a la expectativa, entre ellos el FC
Barcelona.
El club azulgrana está atento a Isco por su
indiscutible calidad (interior de buen toque y desequilibrio), edad (24
años) y oportunidad de mercado: si decide acabar su contrato, sería un
chollo por mucho que tuviesen que pagarle una suculenta prima de fichaje
por llegar libre.
No solo los técnicos del club conocen sobradamente la clase
que atesora el malagueño porque ya estuvo cerca de fichar como
azulgrana antes de recalar en el Real Madrid en 2013, también es un
jugador muy del gusto del presidente, Josep Maria Bartomeu. No es su intención hacer de entrenador, pero sabe que pocos técnicos le pondrían trabas si pone en bandeja un fichaje así.
Entre Barça y Madrid existe una especie de pacto no escrito de ‘no agresión’, es decir, no tocarse jugadores, desde el ‘caso Figo’, a quien no hay que olvidar que fichó Florentino Pérez, actual presidente blanco. Sin embargo, con Neymar
el Madrid ha intentado repetir aquella jugada. sin ir más lejos, el
pasado verano. Periodistas de Madrid que se jactan de tener contacto con
la ‘cúpula’ del club blanco han informado en repetidas ocasiones sobre
el interés del Madrid en atar al brasileño antes de que renovase por el
Barça.
Una hipotética llegada de Isco al Barça en junio de 2018, con 26 años, coincidiría con que Iniesta, jugador de su perfil, ya tendría 34 años.
Isco y su entorno no se cierran la puerta a ningún escenario.
Es decir, se puede dar cualquiera de estas tres opciones: que renueve
con el Madrid si la mejora contractual es notable (estaría pidiendo 10
millones de ficha anual); que en verano salga traspasado si el Madrid
prefiere ingresar alguna cantidad importante en 2017 antes que ver cómo
queda libre en 2018; o que extinga su contrato y se vaya a coste cero.
Isco y su entorno saben que el Barça siempre le ha tenido en
el punto de mira y que sigue pendiente de su situación. En todo caso,
intuyen que el Madrid apretará para renovarle, ya sea para apostar por
él como clave de futuro o para intentar venderlo el próximo verano a un
club potente, preferentemente de la Premier. Si eso sucede, siempre
intentará colocar alguna cláusula que encarezca muchísimo un traspaso
desde ese nuevo club al Barça. Es lo que sucedió con Di Maria cuando fue vendido al United.
Noticias contradictorias
También Isco y su familia entienden que sería
duro cambiar directamente del Madrid al Barça, sobre todo de cara a la
afición blanca. Eso sí, a día de hoy todo está abierto y el jugador le
ha dado instrucciones a su padre y agente, Paco Alarcón, de que
no hable todavía de una renovación sobre la que hay una guerra de medios
en Madrid. Unos dicen que ya ha habido oferta del Madrid, como Manu Carreño en la Ser, y otros, como Manolo Lama en la Cope, lo niegan taxativamente
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