Aplicará multas graduales para los usuarios que, de manera repetida, no validen su billete La medida deberá pasar por comisión y pleno
La concejalía ya tuvo que cambiar el sonido de la máquina para evitar confusiones al validar el billete.
No es lo mismo colarse en la LAC descaradamente y mirar con reojo si viene el revisor para bajar en la siguiente parada que tener un despiste y picar mal el bonobús en las validadoras. Conscientes de esta realidad el equipo de gobierno del PSOE en el Ayuntamiento de Granada aprobó ayer en Junta de Gobierno local la modificación de la ordenanza de usuarios del transporte público que supone una importante rebaja de las sanciones ya planteada por el PP ante las incesantes quejas de los usuarios. En concreto, según destacó ayer la concejal de Movilidad, Raquel Ruz, la modificación de la ordenanza consiste en la reducción del importe de las sanciones a usuarios de la Línea de Alta Capacidad que viajen sin validar su billete de 40 a 20 euros. Un cambio que no obstante, tendrá que pasar por la comisión municipal de movilidad y por pleno para en entrar en vigor. "Con la medida, el gobierno de la ciudad atiende una de las principales quejas que recibíamos de los viajeros y usuarios de esta línea, relativa al elevado precio del recargo que, en ocasiones, penaliza a personas que por error, sin voluntad alguna de defraudar, subían al vehículo sin haber validado correctamente su billete y eran obligados a pagar 40 euros en los cuatro días siguientes a la infracción", destacó Ruz.
Por otra parte, la medida contempla sanciones graduales para usuarios que, de manera reincidente, incurran en la no validación de su billete.
En la ordenanza actualmente en vigor, la persona que por error no valida su billete, se ve obligada a pagar 40 euros en los cuatro días siguientes y, en caso de no poder hacerlo, se le aplica un recargo de 270 euros. Para la edil, se trata de un "salto cuantioso e injustificado". Por este motivo, la modificación propuesta no solo rebaja de 40 a 20 el recargo; también contempla que si no se abonan esos 20 euros en los cuatro primeros días, se imponga una primera sanción de 90 euros, de 180 para los usuarios que repitan la infracción, es decir que vuelvan a subir al vehículo sin validar su billete en una segunda ocasión, y de 270 euros la tercera vez que un mismo usuario cometa esta infracción en esta línea de autobús.
"Es importante y resulta más justo distinguir entre usuarios que por error y sin voluntad de defraudar, dejan de validar su billete una vez; de aquellas personas que, en repetidas ocasiones, esquivan el pago", incidió la edil que defiende que la cuantía económica sea progresiva y no tan elevada para quienes, por vez primera y por error involuntario, incumplen con la necesaria validación".
Meses atrás, el PP también tuvo que reforzar la labor informativa a pie de parada para "enseñar" a los usuarios a utilizar un servicio que no se termina de entender así como modificó el sonido de la validadora para evitar confusiones. Cuando se puso en marcha, la máquina emitía un sonido que provocaba que los usuarios no percibieran que se habían quedado sin saldo. Tras la modificación, un desagradable pitido informa al usuario de la falta de saldo en el bonobús. Hay muy poco margen para las confusiones.
Por otra parte, la medida contempla sanciones graduales para usuarios que, de manera reincidente, incurran en la no validación de su billete.
En la ordenanza actualmente en vigor, la persona que por error no valida su billete, se ve obligada a pagar 40 euros en los cuatro días siguientes y, en caso de no poder hacerlo, se le aplica un recargo de 270 euros. Para la edil, se trata de un "salto cuantioso e injustificado". Por este motivo, la modificación propuesta no solo rebaja de 40 a 20 el recargo; también contempla que si no se abonan esos 20 euros en los cuatro primeros días, se imponga una primera sanción de 90 euros, de 180 para los usuarios que repitan la infracción, es decir que vuelvan a subir al vehículo sin validar su billete en una segunda ocasión, y de 270 euros la tercera vez que un mismo usuario cometa esta infracción en esta línea de autobús.
"Es importante y resulta más justo distinguir entre usuarios que por error y sin voluntad de defraudar, dejan de validar su billete una vez; de aquellas personas que, en repetidas ocasiones, esquivan el pago", incidió la edil que defiende que la cuantía económica sea progresiva y no tan elevada para quienes, por vez primera y por error involuntario, incumplen con la necesaria validación".
Meses atrás, el PP también tuvo que reforzar la labor informativa a pie de parada para "enseñar" a los usuarios a utilizar un servicio que no se termina de entender así como modificó el sonido de la validadora para evitar confusiones. Cuando se puso en marcha, la máquina emitía un sonido que provocaba que los usuarios no percibieran que se habían quedado sin saldo. Tras la modificación, un desagradable pitido informa al usuario de la falta de saldo en el bonobús. Hay muy poco margen para las confusiones.
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